La micropigmentación capilar es un tratamiento que tiene como objetivo conseguir un efecto visual diferente en el cuero cabelludo de tal manera que parecerá que tienes pelo y, en consecuencia, ganarás en autoestima.

Es un procedimiento muy sencillo que consiste en la introducción de pigmentos a nivel dérmico especialmente indicado para aquellas personas que no pueden recurrir a la cirugía, ya sea por contraindicaciones o porque los microinjertos no resultan prácticos.

Este tratamiento correctivo puede dotar de color y forma a diversas partes del cuerpo por lo que su aplicación es bastante común en cejas, labio o pecho, lo que nos da seguridad de una técnica altamente perfeccionada; para ello, se emplea anestesia tópica en la zona a tratar y así garantizar un procedimiento totalmente indolo.

Lo normal es que en un máximo de 3 sesiones el tratamiento se complete, aunque al ser un proceso muy corto, en una jornada pudiera estar finalizado. En un primer momento, los pigmentos utilizados darán una sensación óptica de un cabello más oscuro de lo que realmente es, efecto que con los días se va reequilibrando.

Es importante destacar, además, que el proceso es muy corto y, en una jornada, está finalizado. Se utilizan pigmentos que, en un primer momento, darán una sensación óptica de un cabello más oscuro de lo que realmente es. No hay problema porque, con los días, se irá reequilibrando.